Hace rato que las concesionarias no vivían un comienzo de año tan promisorio. Las últimas estimaciones dan cuenta de ventas de cero kilómetro por un total de 65.000 unidades para este comienzo de 2025.
Si se confirman estas proyecciones, las ventas de autos nuevos representarán prácticamente el doble que las de enero del año pasado. Había sido un enero especial, tras la devaluación de diciembre y la incertidumbre por el devenir económico.
De todas formas, las ventas de autos y camionetas 0Km de este comienzo de año estuvieron un 29% por arriba que las de enero de 2023. Y un 50% más arriba que las de enero de 2022.
Hay que trasladarse hasta enero de 2018 para ver un enero tan bueno. En aquel año, previo a la explosión cambiaria de abril, durante el gobierno de Mauricio Macri, las ventas habían trepado a 118.000 unidades. Fue el mejor enero de la historia en ventas de autos nuevos.
Electrodomésticos: otro ganador
La gran recuperación de las ventas de autos se da en un contexto interesante de analizar. Hay otros segmentos del consumo que también se perfilan como ganadores para este 2025, luego de varios años en declive.
Se trata del rubro de los electrodomésticos que —luego de una primera parte de 2024 para el olvido— atraviesan una mejora inocultable.
Hasta mayo del año pasado, la caída de ventas en este sector había tocado un piso del 50%. Nada menos. La falta de dólares para producir e importar y la incertidumbre provocaron un crash del consumo.
La estabilidad y la desinflación fueron determinantes para el resurgimiento. A tal punto que en algunas grandes cadenas ya detectan una mejora en las ventas del 30% a 40% respecto del año pasado. «Ya recuperamos lo perdido y volvimos a niveles de ventas más normales», dijeron a iProfesional en una de esas cadenas de electros tradicionales.
«Los precios de los productos se acomodaron a una lógica del mercado. Veníamos de tiempos con alzas muy bruscas. Y también hay más variedad», apuntó Raúl Echevarri, de la cadena Tiribelli, con sede en Mar del Plata.
Crédito, cuotas y algo más
La mejora en estos segmentos se vincula con la reaparición del crédito al consumo. Los préstamos bancarios a las familias vienen creciendo a razón de entre 6% y 9% mensual, en términos reales, a pesar de que los costos se mantienen muy arriba de la inflación esperada.
Un dato para entender el boom del sector automotor: según ACARA —la cámara que agrupa a las concesionarias—, prácticamente la mitad de las ventas se realiza con financiamiento. Ya sea bancario (créditos prendarios) o a través de planes de ahorro.
Hasta el año pasado, el nivel de financiamiento llegaba al 30%.
Algo parecido sucede con los electrodomésticos. A pesar de la desaparición del «Ahora 12» y la casi nula oferta del «Cuota Simple», ya que el Gobierno se niega a subsidiar las cuotas, los pagos a plazo fueron determinantes para la mejora en el sector.
Son los bancos los que promueven ese financiamiento más barato, a través de promociones con las distintas tarjetas de crédito.
Los sectores que se recuperan y los que siguen estancados en 2025
Está claro cuál es la dinámica que está funcionando hoy en día. Se nota un revivir en aquellos segmentos donde se puede financiar la compra. Ya sean electrodomésticos o autos.
Y una lenta recuperación de aquellos rubros donde manda el efectivo o el pago en un solo golpe, sin posibilidad de financiamiento.
Esos sectores —como el consumo masivo, las ventas en los supermercados— tendrán una recuperación más lenta.
De hecho, en las primeras tres semanas del mes, las ventas en las grandes cadenas estuvieron entre 6% y 7% por debajo de las tres semanas iniciales del año 2024. Y a pesar de que ya en ese momento se evidenciaba una fuerte contracción del consumo masivo.
Las ventas de enero 2024 habían estado 8,3% por debajo de las de enero de 2023.
«El tema es el retraso en los ingresos de los consumidores, que perdieron casi 30 puntos contra la inflación entre 2023 y 2024. No creo que las ventas den en positivo antes de marzo. Este año será levemente positivo para el consumo masivo», apuntó Osvaldo del Río a iProfesional.
Está claro: el consumo, de acuerdo a los primeros registros de este 2025, se moverá en dos marchas: una que verá como ganadores a los rubros que pueden dar crédito y prorratear el consumo actual en cuotas que puedan ser abonadas por los consumidores.
Y otra marcha, la del «efectivo», donde todo es más moderado, en un contexto donde los salarios y los ingresos de los trabajadores avanzan lentamente.
Los bancos, en positivo
Una reciente encuesta entre bancos realizada por el BCRA y destacada en el último informe de la consultora EconViews (Miguel Kiguel) da cuenta de la expectativa de los financistas respecto del otorgamiento de créditos para este año.
«Pensando en los próximos tres meses, las entidades financieras esperan que la demanda siga creciendo», dice el reporte.
«Los hipotecarios son los que mejores expectativas generan, con un 75% de los bancos esperando un aumento. Para otros créditos al consumo (personales) este porcentaje baja levemente a 73.7%. En el caso de las tarjetas de crédito, el 52.6% espera que mejore la demanda y el 47.4% no ve cambios. En los prendarios, el 36.4% cree que habrá un aumento, pero hay un pequeño porcentaje (9.1%) que ve una leve caída», concluyó.