martes, 18 de marzo de 2025 19:50
Por las quejas de gobernadores y productores, el Gobierno suspendió temporalmente el ingreso de carne con hueso a la Patagonia
El Gobierno había tomado la decisión de permitir, tras 24 años de restricciones, el ingreso de carne con hueso a la Patagonia, una región libre de fiebre aftosa sin vacunación.
Esta medida, oficializada a través de la Resolución 180/2025 del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), modifica normativas que desde 2001 prohibían el traslado de productos cárnicos desde zonas con vacunación hacia la región patagónica, con el fin de preservar su estatus sanitario.
A partir de esta resolución, se establecían nuevas condiciones sanitarias que permiten el ingreso de carne y material genético de otras partes del país y del exterior, sin comprometer la seguridad de la región.
El gobernador rionegrino Alberto Weretilneck cuestionó con dureza la medida. “El Gobierno Nacional impone una resolución que destruye lo que miles de productores construyeron con esfuerzo durante dos décadas. La Patagonia es zona libre de fiebre aftosa sin vacunación gracias al trabajo de nuestros ganaderos y frigoríficos, pero ahora, desde un escritorio en Buenos Aires, un burócrata pretende borrar todo de un plumazo para favorecer a los grandes supermercados y exportadores”, mencionó en su cuenta de X.
En tanto, su par neuquino Rolando Figueroa, a través de la misma red social, anticipó esa suspensión por 90 días. “Tenemos que eliminar injusticias en la Patagonia, bajar el precio de la carne y proteger a nuestros productores. Vamos a mirar con atención la distribución de la rentabilidad dentro de la cadena de valor, para que en ese camino no se castigue al productor reconociéndole lo que vale, y eliminando los privilegios de algunos vivos, que perjudican con los precios de venta a la gente”, mencionó.
Esta decisión del Gobierno también responde a un objetivo más amplio: fortalecer la competitividad del sector agroalimentario sin comprometer la bioseguridad. El Senasa destaco que las nuevas normativas buscan garantizar la seguridad sanitaria del país y, al mismo tiempo, facilitar el comercio de productos cárnicos dentro de la región, en un contexto donde la demanda y los precios están siendo factores determinantes en la economía local.