viernes, 25 de abril de 2025 15:00
Tras un torbellino de rumores y especulaciones, el popular cantante L-Gante decidió romper el silencio y revelar en primera persona el delicado estado de su salud. Con tan solo 25 años, el artista confesó en el programa «Mujeres Argentinas» que los chequeos médicos de rutina arrojaron sorpresas que lo obligaron a tomar cartas en el asunto de manera urgente.
«Fui a hacerme los chequeos generales y nos llevamos una sorpresa que dio lugar a una charla más seria. Me diagnosticaron algo cardíaco, por suerte se puede tratar y hay que seguir con los controles», confesó el joven músico, dejando entrever la preocupación inicial ante el diagnóstico. Sin embargo, procuró transmitir un mensaje de calma a sus seguidores, asegurando que la afección es tratable y que ya se encuentra bajo un tratamiento interdisciplinario para mejorar su condición.
Pero el diagnóstico cardíaco no fue la única sorpresa que revelaron los estudios médicos. Con una franqueza impactante, el creador de la «Cumbia 420» amplió el panorama de sus dolencias: «En principio tengo que hacer una dieta, hay cosas que puedo comer y otras que no. También me tengo que seguir haciendo controles, aflojar un poco el ritmo por lo cardíaco más que nada y descansar un poco. Aparte de lo cardíaco, tengo problemas renales y gastrointestinales».
A pesar de la complejidad del cuadro clínico, el artista se mostró resiliente y con intenciones de no minimizar la situación, pero tampoco alarmar a su público. «Todo lo que tengo se puede tratar, hay cosas peores. Soy ultra activo pero no soy un robot, el cuerpo pasa factura», reflexionó, reconociendo que su ritmo de vida vertiginoso finalmente le pasó factura a su organismo.
Ante la inevitable pregunta sobre si estos problemas de salud podrían significar un adiós a su exitosa carrera musical, el cantante se mostró ambiguo pero esperanzado.
«Eso se decía… quiero creer que no. Estoy enfocado, con muchos proyectos en la música y espero poder seguir. El show del 7 de mayo va a ser especial… tuve un pico de estrés y quiero descansar un poco», expresó, dejando una luz de esperanza para sus fanáticos, aunque admitiendo la necesidad de bajar el ritmo y priorizar su bienestar.
Finalmente, el joven músico se refirió a las declaraciones públicas de su madre, Claudia Valenzuela, quien había manifestado su profunda preocupación por la salud de su hijo.
Con madurez, el artista asumió la responsabilidad de su cuidado: «Yo soy un adulto, tengo que entender que si no me cuido yo, no lo va a hacer nadie. Trato de cumplir, de bajar lo que me estrese y bajar el ritmo». De esta manera, L-Gante enfrenta un nuevo desafío en su vida, esta vez lejos de los escenarios, pero con la determinación de cuidar su salud para poder seguir compartiendo su música con su público.