El número de muertos por las inundaciones en el centro de Texas aumentó a 52, informaron las autoridades a última hora del sábado. Entre las personas desaparecidas hay más de 20 niñas del campamento de verano Camp Mystic, dijo el administrador de la ciudad de Kerrville, Dalton Rice, en una conferencia de prensa el sábado por la noche. «Estamos analizando esto de dos maneras, las llamadas ‘desaparecidas conocidas’, que son las 27… No pondremos un número en el otro lado porque simplemente no lo sabemos», dijo Rice y afirmó que podría haber más personas desaparecidas en la región.
Los rescatistas continúan la búsqueda a contra reloj de campistas, turistas y residentes que se mantienen desaparecidos. Según las autoridades, cerca de 900 personas fueron rescatadas, incluidas algunas que se aferraron a los árboles para no ser arrastradas por las aguas, después de que una tormenta repentina cayera alrededor del río Guadalupe, al noroeste de San Antonio. Entre los desaparecidos hay decenas de personas del campamento de verano cristiano Camp Mystic, la mayoría niñas, después de que las aguas del río Guadalupe subieran rápidamente 9 metros.
«Sabemos que los ríos crecen, pero nadie lo vio venir», lamentó el juez del condado de Kerr, Rob Kelly, el principal funcionario local. El domingo, 6 de julio, se espera una amenaza localizada de inundaciones repentinas en partes del centro y centro-norte de Texas hasta las 4 p.m., según el Servicio Meteorológico Nacional. Habrá precipitaciones totales por hora de 2,5 a 7,6 cm, o posiblemente más, y hasta 15 cm en algunos puntos.
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Un desastre en el Día de la Independencia
El vicegobernador de Texas, Dan Patrick, sostuvo que un número desconocido de visitantes había llegado a la zona para celebrar el Día de la Independencia junto al río. «No sabemos cuántas personas estaban en tiendas de campaña al lado, en pequeños remolques al lado, en casas alquiladas al lado», dijo en Fox News Live. Según Patrick, el Campamento Mystic albergaba a 700 niñas al momento de la inundación. Otro campamento de niñas, Heart O’ the Hills, informó en su sitio web que la copropietaria, Jane Ragsdale, falleció en la inundación, pero que no había campistas presentes.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, declaró en rueda de prensa que le había solicitado al presidente Donald Trump que firmara una declaración de desastre, lo que desbloquearía la ayuda federal para los afectados. La secretaria de Seguridad Nacional de EE. UU., Kristi Noem, afirmó que Trump cumpliría con esa solicitud. Trump afirmó previamente que él y su esposa, Melania, estaban orando por las víctimas. «Nuestros valientes socorristas están en el lugar haciendo lo que mejor saben hacer», expresó en redes sociales.
El mandatario ya ha esbozado planes para reducir el papel del Gobierno federal en la respuesta a los desastres naturales, dejando que los estados asuman una mayor parte de la carga por sí mismos. Videos publicados en línea mostraban plataformas de hormigón donde antes se alzaban viviendas y montones de escombros a lo largo de las orillas del río. Los rescatistas lograron sacar a residentes de los tejados y árboles, a veces formando cadenas humanas.
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¿Cómo se generó la tragedia?
El Servicio Meteorológico Nacional de EE. UU. informó que la emergencia por las inundaciones repentinas prácticamente ha terminado en el condado de Kerr, tras las tormentas eléctricas que arrojaron más de 30 centímetros de lluvia. Esto representa la mitad del total que la región registra en un año típico. El condado de Kerr se encuentra en Texas Hill Country, una zona rural conocida por su terreno accidentado, ciudades históricas y atracciones turísticas.
Intensas lluvias de hasta 25 cm en pocas horas provocaron en los últimos días el desbordamiento de los ríos Guadalupe y Llano, causando inundaciones repentinas en varios condados ribereños de Texas (EE. UU.). Por ejemplo, el caudal del río Guadalupe es habitualmente de unos dos metros de altura, pero pasó a alcanzar casi nueve luego de apenas dos horas y media de lluvias torrenciales y su desbordamiento afectó a varios condados en un área ubicada a casi 200 km de San Antonio, así como hábitats de vida silvestre y campamentos.
Se cree que algunos segmentos del cauce incluso han superado esa altura, porque los medidores fallaron después de terminar completamente sumergidos, de acuerdo con Bob Fogarty, meteorólogo del Servicio Nacional de Meteorología (NWS) para el área de San Antonio/Austin. Dalton Rice, administrador de la ciudad de Kerrville, la sede del condado, explicó a los periodistas el viernes que las inundaciones extremas ocurrieron antes del amanecer con poca o ninguna advertencia, lo que impidió que las autoridades emitieran órdenes de evacuación anticipadas mientras el río Guadalupe subía rápidamente por encima del nivel de inundación mayor en menos de dos horas.
Los funcionarios de gestión de emergencias del estado habían advertido ya el jueves que el oeste y el centro de Texas enfrentaban fuertes lluvias y amenazas de inundaciones repentinas, citando los pronósticos del Servicio Meteorológico Nacional antes del fin de semana festivo. Sin embargo, los pronósticos «no predijeron la cantidad de lluvia que vimos», dijo W. Nim Kidd, director de la División de Gestión de Emergencias de Texas, en una conferencia de prensa el viernes por la noche.
El desastre del fin de semana se hace eco de una catastrófica inundación del río Guadalupe de 1987, en la que 10 adolescentes se ahogaron cuando intentaban salir de un campamento de la iglesia, según el Servicio Meteorológico Nacional.