Javier Milei es, según un informe de la consultora Ad Hoc, el usuario no anónimo que más insultos y agresiones vertió en redes sociales en los últimos dos años. El presidente argentino fue superado solamente por cinco cuentas anónimas identificadas como trolls, lo que lo convierte en el político con mayor volumen de lenguaje violento en todo el ecosistema digital del país.
El informe, titulado “La provocación permanente”, se basa en el análisis de más de 27,5 millones de insultos registrados entre enero de 2023 y junio de 2025. La conclusión es contundente: la confrontación se ha vuelto el núcleo de la política digital argentina, y Milei no es un actor más, sino el epicentro de ese fenómeno.
Milei aparece como el sexto usuario más agresivo del país, detrás de cuentas como Traductor Te Ama, Re Corriendo Juntos, El Toro, La Matancera Antik! y Mariana Buccino, todas asociadas a estrategias troll.
Fuente: Consultora Ad Hoc.
Insultar como método, no como exabrupto
La particularidad que señala el estudio es que el presidente no utiliza el insulto como un desliz emocional, sino como parte de una estrategia discursiva deliberada. En términos del informe, Milei “cumple el rol de provocador digital”, una figura con legitimidad real que adopta el lenguaje confrontativo para sostener y ampliar su base de apoyo.
La investigación muestra que el uso de insultos en redes se duplicó desde 2023, y que el discurso agresivo se contagia, se replica y se amplifica rápidamente, especialmente cuando es impulsado desde figuras con alto nivel de exposición pública como Milei.
“El troll busca provocar. El provocador legitima. El amplificador viraliza”, resume el informe al describir cómo funciona el ecosistema de violencia digital.
Del timeline al micrófono: Milei también insulta fuera de las redes
La lógica confrontativa de Milei no se agota en X (Twitter). En el evento Derecha Fest, por ejemplo, el presidente llamó “basura inmunda” a un senador, calificó a los políticos de izquierda como “parásitos mentales”, y acusó a la oposición de ser una “casta chorra, parasitaria e inútil”. A periodistas críticos los tildó de “ensobrados”.
Esta estrategia de provocación permanente también tiene impacto en otros actores. Empresarios, periodistas y usuarios comunes se ven arrastrados a una conversación digital cada vez más agresiva, en la que el insulto es la herramienta dominante y la discusión racional queda relegada.
“No se puede seguir así dos años más”
Desde el sector empresarial ya comienzan a encenderse las alarmas. Tal como reveló el sitio LPO, hay preocupación por el desgaste que implica sostener un modelo político basado en la confrontación permanente, especialmente si quien lidera esa narrativa es el propio jefe de Estado.
El informe de Ad Hoc también advierte que la violencia discursiva no es exclusiva del oficialismo. Si bien Milei lidera el ranking, tanto en el PRO como en el peronismo hay figuras que utilizan el insulto como recurso político frecuente. La diferencia es que el presidente lo hace de forma sistemática y con mayor intensidad.
Un país que insulta cada vez más
En la Argentina digital de 2025, se registran más de un millón de insultos mensuales, con picos que superan los niveles de las campañas electorales. Los investigadores sostienen que la tendencia no se detiene, y que las redes sociales dejaron de ser espacios de conexión para transformarse en fábricas de dopamina y polarización.
“El secreto no es cambiar las cosas, sino captar tu atención”, dice el informe, que concluye con una advertencia: si la política se vuelve puro espectáculo, pierde su razón de ser.