El Tribunal Oral Federal N° 6 sentenció a Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte por el intento de asesinato a Cristina Fernández de Kirchner. Sabag Montiel, quien apuntó y gatilló un arma a centímetros de la cabeza de la ex presidenta, fue condenado a 10 años por tentativa de homicidio agravado y portación ilegal de arma de guerra. Al unificar esta pena con una condena previa por tenencia y distribución de material de abuso sexual infantil, recibió una pena total de 14 años. Uliarte, considerada partícipe necesaria del hecho, fue condenada a 8 años y 2 meses de prisión.
Los jueces Ignacio Fornari, Sabrina Namer y Adrián Grünberg, absolvieron a Nicolás Carrizo, señalado como “el jefe de los copitos”, tras el retiro de la acusación por parte de la fiscalía y la querella. Durante el juicio quedó demostrado que Carrizo no tuvo participación en el atentado. En sus últimas palabras, expresó su pesar por haber estado preso durante casi tres años: “Siento impotencia, nadie me va a devolver este tiempo”, dijo ante el tribunal.
Sabag Montiel, en cambio, utilizó su derecho a hablar para lanzar una serie de teorías inconexas. Mencionó al diputado Gerardo Milman, aseguró que querían matarlo y hasta involucró al presidente brasileño Lula Da Silva en una supuesta maniobra diplomática. La jueza Namer lo interrumpió en varias oportunidades para pedirle que se limitara a los hechos del juicio. Brenda Uliarte no emitió palabra y permaneció aislada durante la última jornada del proceso.
El tribunal desestimó los planteos de inimputabilidad por presuntos trastornos mentales y rechazó los agravantes de alevosía y violencia política. La sentencia fue dictada en una audiencia pública, y los fundamentos se darán a conocer el 9 de diciembre, una instancia clave para conocer el análisis legal y probatorio de uno de los casos judiciales más impactantes de los últimos años en la política argentina.