El procedimiento se desarrolló durante un control vehicular e identificación de pasajeros en el marco de los operativos preventivos que la fuerza provincial ejecuta en rutas nacionales y provinciales. Al detener un micro de larga distancia, los efectivos revisaron la documentación y el equipaje según los protocolos vigentes. Fue entonces cuando la perra especializada señaló una mochila ubicada en el interior del colectivo, lo que permitió identificar al propietario, un hombre de 41 años.
Al inspeccionar el equipaje, el personal policial encontró 551 comprimidos de ansiolíticos, Rem-Midazolam y Dormicum Midazolam de 15 mg, además de un teléfono celular, un pasaje, dos tickets y cuatro recetas médicas. Según fuentes policiales, la cantidad hallada excedía ampliamente lo permitido para uso personal, motivo por el cual se dio inmediata intervención a la Justicia Federal, que ahora analiza la situación legal del involucrado.
Todo lo secuestrado fue puesto a disposición del Juzgado Federal competente, que determinará los pasos procesales a seguir. Desde la Policía provincial resaltaron la importancia de estos controles en puntos estratégicos y el rol clave de los canes antinarcóticos para detectar sustancias ocultas.