Este lunes se cumplió un año desde la detención de Nahuel Gallo, gendarme argentino retenido en Venezuela sin expediente abierto, sin abogado y sin contacto familiar.
Su esposa, María Alexandra Gómez, afirmó en una entrevista con Infobae en Vivo: “No está detenido ni preso, él sufre una desaparición forzada, pese a que sabemos dónde está”.
Desde el primer día, la familia recibe información de manera extraoficial, lo que bloquea cualquier acción legal. Gómez explicó: “Nos enteramos de Nahuel por vías informales. No recibimos información que nos permita ayudarlo legalmente. A él lo acusan de terrorista y de que fue a espiar a Venezuela, lo acusan de que lo mandó el gobierno de Milei””.
Sin acceso a tribunales ni asistencia consular
Gallo permanece en Rodeo 1, una cárcel de máxima seguridad, y nunca se presentó ante tribunales ni recibió ayuda consular. Gómez denunció que las autoridades venezolanas rechazaron su solicitud de hábeas corpus.
La familia afirma que lo acusan de terrorismo y espionaje de manera falsa. Su única motivación fue reencontrarse con su hijo y familia.
Cómo fue la detención
Gallo ingresó a Venezuela por vía terrestre desde Colombia, sin uniforme ni armamento, y lo retuvieron en un paso fronterizo. Gómez relató: “Le dijeron que harían una entrevista, pero lo retuvieron cuatro horas hasta que llegó el personal encargado de desapariciones forzadas”.
Los intentos legales se encontraron bloqueados desde el inicio. Gómez detalló: “El fiscal me dijo que era un problema diplomático y que se resolvería, pero nunca recibimos respuesta efectiva”.
Apoyo del Estado argentino
El Gobierno argentino y la Gendarmería Nacional acompañan a la familia. Gómez contó: “Patricia Bullrich también nos acompañó. Hacen todo lo posible a nivel diplomático para traer a Nahuel”.
A pesar del apoyo, la pareja se muestra preocupada por la falta de avances y la duración del cautiverio.
Un hijo que lo espera
Gómez explicó cómo protege a su hijo Víctor, de tres años, frente a la ausencia del padre: “Le digo que Nahuel está trabajando y que volverá por Navidad. Le muestro fotos y videos para tranquilizarlo”.
La familia mantiene la esperanza de una resolución diplomática mientras continúa reclamando ante la Corte Penal Internacional, que investiga crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
Fuente: Infobae
