sábado, 20 de diciembre de 2025 12:00
Sandra Borghi puso fin a su etapa en El Trece después de veinticinco años de labor ininterrumpida en el canal. La conductora de Mediodía Noticias, ciclo que lideraba junto a Luis Otero, confirmó que esta fue una de las decisiones más trascendentes de su carrera periodística. Este cierre marca la conclusión de un vínculo extenso con la señal de Artear y el inicio de una transición personal y laboral de gran importancia.
La determinación de abandonar el medio no fue un impulso repentino, sino el resultado de un proceso interno que le tomó todo un año procesar. Borghi confesó que durante varios meses convivió con la sensación de que algo debía cambiar en su vida, aunque le costó dar el paso definitivo por el peso emocional de su historia en la empresa. Gracias al acompañamiento y la contención de su entorno, pudo finalmente concretar su despedida del canal.
La periodista aclaró que su partida no responde a una situación de conflicto, sino a una búsqueda de crecimiento y una transformación profunda. Para ella, este momento representa un quiebre necesario para evolucionar profesionalmente fuera de los límites del noticiero que habitó por tanto tiempo. A pesar del impacto que genera su salida, Borghi aseguró que nunca imaginó que este día llegaría realmente debido al fuerte vínculo afectivo con su lugar de trabajo.
Ante las versiones que sugerían problemas internos, la conductora desmintió categóricamente cualquier enfrentamiento y afirmó que sus compañeros de trabajo son su familia. Borghi destacó la excelente relación que mantiene con las autoridades de la señal y mencionó que recibió una carta interna muy emotiva del director de noticias, Ricardo Ravanelli. Según explicó, el texto la conmovió tanto que no pudo terminar de leerlo por la emoción que le provocó.
En cuanto a lo que vendrá en su carrera, Sandra Borghi manifestó su intención de tomarse un tiempo para analizar propuestas antes de definir su próximo destino. Reveló que tiene interés en explorar un perfil más empresarial y volcarse a tareas relacionadas con el detrás de cámara en proyectos de carácter más personal. Este nuevo enfoque marca un alejamiento de la exposición diaria que mantuvo durante décadas frente a las cámaras de televisión argentina.
No obstante, la periodista dejó una puerta abierta a nuevas posibilidades mediáticas tras un intercambio con Ángel de Brito en el programa LAM. Si bien descartó sumarse de inmediato como panelista, tomó el desafío propuesto por el conductor y pidió no descartar la silla que se le ofreció públicamente. Así, mientras cierra una puerta de un cuarto de siglo, Borghi se prepara para enfrentar desafíos desconocidos en el panorama mediático actual.
