sábado, 26 de julio de 2025 11:10
El Complejo Volcánico Planchón-Peteroa, ubicado en el sur de la provincia de Mendoza, en el departamento de Malargüe y sobre el límite con Chile, se encuentra bajo vigilancia intensiva luego de detectarse una inusual actividad interna. El Servicio Geológico Minero Argentino (SEGEMAR), a través del Observatorio Argentino de Vigilancia Volcánica (OAVV), elevó el nivel de alerta técnica a amarillo, ante el aumento de señales sísmicas asociadas al movimiento de fluidos magmáticos.
Desde el pasado 10 de julio, los registros muestran un incremento significativo en los sismos tipo LP (largo período) y en las señales de Tremor, indicadores típicos de circulación interna de magma. Según el informe oficial, el nivel de energía alcanzó un pico el 16 de julio, superando los valores considerados normales para este sistema volcánico.
Aunque no se observan cambios en la superficie y otros parámetros se mantienen estables, el SEGEMAR advirtió que este patrón ha precedido ciclos eruptivos en el pasado, caracterizados por la emisión de cenizas volcánicas. “No se descartan explosiones súbitas de baja o moderada magnitud que afecten el entorno inmediato a los cráteres activos”, señalaron desde el organismo.
El Planchón-Peteroa, que supera los 3.500 metros de altura, es uno de los volcanes más activos del país, con entre 15 y 20 erupciones registradas desde el año 1600. Ocupa el segundo lugar en el Ranking de Riesgo Volcánico elaborado por el SEGEMAR, lo que explica la fuerte atención técnica y logística que recibe.
El monitoreo se realiza en conjunto con el Observatorio Volcanológico de los Andes del Sur (OVDAS) de Chile, la Agencia Federal de Emergencias (AFE) y bajo el paraguas del Sistema Nacional para la Gestión Integral del Riesgo (SINAGIR).
Las autoridades instaron a la población a mantenerse informada exclusivamente a través de canales oficiales, ante la posibilidad de nuevos reportes sobre la evolución de la actividad volcánica.