jueves, 11 de septiembre de 2025 18:00
El nombre de Morena Rial pocas veces pasa desapercibido. Sus conflictos familiares, las causas judiciales que la rodearon y sus apariciones mediáticas siempre terminan generando debate. Sin embargo, esta vez la noticia tiene un tinte diferente: lejos de los problemas que marcaron parte de su historia reciente, decidió apostar por un camino empresarial que promete abrirle una nueva etapa.
Durante años, cada comentario suyo sobre el trabajo fue tema de discusión. Declaraciones en las que cuestionaba las rutinas laborales o experiencias contadas por personas cercanas, como Luis Ventura, alimentaron la idea de que no estaba interesada en sostener una actividad formal. Esa imagen ahora parece querer transformarla con una propuesta concreta.
En sus redes sociales, Morena Rial anunció que su agencia de marketing abrió la agenda de agosto para sumar publicidades y colaboraciones. Con una historia en Instagram que invitaba a “pedir tu fecha”, la joven buscó mostrar que está dispuesta a encarar un camino más organizado y, sobre todo, con proyección económica.
Al ingresar en el enlace compartido, los seguidores se encontraron con una página dedicada a la promoción de influencers. Allí se detalla que Morena Rial ofrece distintos servicios: publicaciones, canjes, sorteos express y hasta colaboraciones con empresas de azar, aunque presentados con grafías adaptadas para evitar restricciones en la plataforma.
Sobre los valores que maneja, no hubo información oficial en la publicación. La invitación fue clara: quienes deseen conocer precios deben enviar un mensaje directo o pedir “info” a la cuenta que centraliza las propuestas. Esa falta de transparencia alimentó la curiosidad y reavivó las críticas de quienes siempre cuestionan su manera de manejarse en redes sociales.
No es la primera vez que el tema del dinero aparece como eje en torno a su figura. Meses atrás circuló un supuesto chat en el que se hablaba de cifras millonarias: dos millones de pesos semanales con contrato mínimo de tres meses. Frente a esas versiones, ella negó todo y aseguró que sus trabajos rondaban valores mucho menores.
Con este nuevo paso, Morena Rial intenta dar respuesta a la pregunta que muchos se hacían: de qué vive. Al mostrar su actividad en el marketing digital, se posiciona como una influencer que capitaliza su popularidad en redes sociales. Sin embargo, la polémica volvió a acompañarla, porque cada movimiento suyo se convierte en blanco de cuestionamientos.
De detenida a empresaria, la joven se enfrenta a un cambio de imagen que podría redefinir su futuro. Aunque aún falta comprobar si logrará sostener este emprendimiento en el tiempo, lo cierto es que dio el primer paso para mostrar una faceta distinta, mucho más vinculada al negocio que al escándalo.