viernes, 26 de septiembre de 2025 13:00
El reciente robo a la casa de Pampita generó una ola de versiones y especulaciones, especialmente en torno a una caja fuerte sustraída del domicilio familiar. La noticia de que los delincuentes se habían llevado este objeto abrió la puerta a comentarios que hablaban de documentos comprometidos o de objetos de altísimo valor.
Frente a esta «tormenta de versiones», Roberto García Moritán, expolítico y exmarido de la modelo, decidió hablar públicamente. Moritán rompió el silencio ante las cámaras de *Intrusos* con la intención de contar «con lujo de detalles» lo que realmente había dentro del cofre metálico.
Buscando desmantelar el misterio instalado en los últimos días, Moritán aclaró el contenido. Confirmó que la caja fuerte guardaba «documentos personales, papeles de trabajo y algunas cosas de uso cotidiano».
El político fue tajante al desmentir rumores sobre documentación de peso vinculada a su persona. Aseguró que «es totalmente falso» que hubiese algo suyo, más allá del «pasaporte de Ana y su partida de nacimiento», e insistió en que la difusión de estas versiones forma parte de una «operación política» constante para «lastimar».
El robo ocurrió el pasado 19 de septiembre, justo cuando Pampita regresaba de un viaje. Moritán dio fuertes detalles sobre la modalidad del asalto, describiéndolo como «muy violento porque revolvieron toda la casa». Agregó que fue un hecho «bien organizado porque se fueron con una caja que medía un metro ochenta».
Días antes del testimonio de Moritán, la propia Pampita había abordado el tema del robo y la supuesta conexión con su ex pareja. La modelo negó que lo de Roberto fuera verdad, señalando que cree que la historia es una «operación política». Asimismo, remarcó que ella no es una persona millonaria, ni tiene ahorros en su casa, y que confía en el personal que cuida a sus hijos.
Más allá del mal momento y la violencia ejercida, Roberto reconoció que la situación pudo haber sido mucho peor. Aunque estaba «muy preocupado por los chicos», lo catalogó como una «desgracia con suerte porque no pasó nada».
Moritán destacó la eficiencia de las autoridades y la tecnología de vigilancia. Expresó que «a estos delincuentes se los encontró rápido porque las cámaras de la casa y de la ciudad funcionaban», garantizando el resguardo de la familia.