Luisina Marisel Vega, la docente de 40 años que recibió seis puñaladas durante un violento asalto en el sur de la Capital, habló públicamente por primera vez tras el ataque y dejó fuertes definiciones sobre la inseguridad que atraviesa la provincia.
La mujer remarcó que estar con vida es prácticamente «un milagro». En un mensaje directo a las autoridades, Vega pidió que se tomen medidas urgentes: “Lo que más pretendo es que las autoridades escuchen esta situación, que pongan mayor cantidad de fuerzas de seguridad en las calles, porque no puede ser que no podamos salir ni a trabajar, ganarnos el pan y tener que estar pensando que también no volvemos a la casa.”
Vega relató que el ataque ocurrió cuando se dirigía a buscar más trabajo: “Yo salía a buscar horas cátedras, como pasa con muchos compañeros que no llegamos a fin de mes lamentablemente.”
La mujer también mencionó que el hecho ocurrió a plena luz del día y no había nadie en la calle para socorrerla.
La violencia del ataque: “Me dice que me va a matar y me insulta por mi género”
Al referirse al agresor, dio detalles contundentes: “En ese momento yo pensé que ‘este tipo me iba a golpear’… Después, cuando me doy cuenta que tiene un elemento punzante, me ataca y me empieza a agredir, dice que me va a matar, me insulta por mi género.”
Contó también que, tras pedir ayuda, una segunda motocicleta se acercó: “Atrás venía otra motocicleta también que me insultaba.”
Y reveló cómo siguió actuando pese a las heridas: “Nunca me había dado cuenta yo de la magnitud de las heridas que tenía… salgo corriendo porque veo esa otra motocicleta que venía y me insultaba.”
“Estoy hablando hoy gracias al hospital”
Vega dedicó un tramo de la entrevista a agradecer a quienes la asistieron en los minutos posteriores al ataque y en su recuperación: “Estoy hablando hoy gracias a ellos, la intervención inmediata que he tenido… me ayudaron a hoy poder estar acá viva.” En especial valoró al Hospital San Juan Bautista:
“Porque muchas veces nos quejamos de nuestro hospital… pero hoy estoy hablando gracias a ellos.”
La docente explicó que aún tiene lesiones graves: “Tengo comprometido el pulmón todavía, mis brazos todos lastimados, la cara, la espalda.”
Aun así, su mayor tristeza pasa por lo laboral: “Me siento muy triste por no poder acompañar a mis alumnos egresados y no poder acompañarlos como paso todos los años.”
Vega reclamó más protección para quienes trabajan en educación: «Somos docentes taxi, vamos de una escuela a otra y hay veces que nadie sabe que salimos de nuestra casa… lamentablemente no sabemos si podemos llegar a la otra escuela ni volver a nuestros hogares.”
El agresor, al penal
En cuanto al agresor, fue identificado como Axel Benjamín Castro, de 22 años. Una cámara de seguridad registró el brutal ataque, lo que le valió que la fiscal de Instrucción Yésica Miranda lo impute por homicidio criminis causa en grado de tentativa. Es que según la valoración de la fiscal, Castro quiso asesinar a la docente para poder consumar el robo y garantizar su impunidad.
En la mañana de este lunes se le confirmó la detención, por lo que fue trasladado al Servicio Penitenciario Provincial mientras avanza la investigación en su contra.
“Catamarca era un pueblo tan tranquilo… no sé qué nos está pasando”
El mensaje final estuvo dirigido directamente a quienes tienen poder de decisión: “A las autoridades, al señor Intendente, gobernador, por favor, que empiecen a sacar las fuerzas de seguridad a las calles, porque lamentablemente no puede ser que no podamos andar ni siquiera a la luz del día tranquilos.”
Y dejó una reflexión que resume su dolor y el de buena parte de la comunidad: “Éramos un pueblo tan tranquilo… No sé qué nos está pasando.”
