viernes, 31 de enero de 2025 18:00
El legado de Diego Maradona sigue marcando la vida de su familia, y su hijo menor, Dieguito Fernando, no es la excepción. Verónica Ojeda, su madre, habló sobre la difícil realidad que enfrenta el niño de 11 años tras la ausencia de su padre. En una entrevista reciente, expresó con preocupación cómo Dieguito sufre por no tenerlo a su lado. «Algunos días está triste, otros habla mucho de él, y hay momentos en los que prefiere no mencionarlo», relató.
Uno de los momentos más impactantes de la charla fue cuando Verónica Ojeda reveló un pedido especial de su hijo. «A veces me dice: ‘Mamá, por favor, no me quiero llamar Diego'», confesó. Este testimonio pone en evidencia la gran carga que implica para el niño llevar el nombre de su padre, una figura icónica del fútbol y de la cultura argentina.
Pese a la compleja situación, Dieguito Fernando encuentra apoyo en su familia. Verónica mencionó que el niño mantiene contacto con sus hermanos mayores y que su vínculo con Giannina y Jana es más cercano. «Ellas entienden por lo que está pasando y respetan su espacio», explicó, resaltando el apoyo de sus hermanas en este momento difícil.
Además, Verónica Ojeda destacó el rol fundamental que ha tenido su pareja, el abogado Mario Baudry, en este proceso. «Se puso la mochila al hombro en todo. Eso me da paz», aseguró. En medio de la exposición mediática y los conflictos legales relacionados con la herencia de Diego Maradona, Baudry se convirtió en un sostén clave para ella y su hijo.
Mientras continúa la batalla legal por la muerte del astro del fútbol, Verónica Ojeda y Dieguito Fernando han intentado mantenerse al margen del escándalo. «En silencio la vamos remando contra todos», expresó con firmeza, dejando claro que su prioridad es proteger la estabilidad emocional del niño.
Sin embargo, la ausencia de Diego Maradona no solo afecta emocionalmente a Dieguito, sino también en su desarrollo personal. Verónica comentó que intenta brindarle herramientas para que pueda encontrar su propio camino, lejos de la presión mediática y las comparaciones con su padre. «Quiero que pueda crecer sin que su apellido sea una carga», señaló.
La ausencia de Diego Maradona es una herida que aún duele en su familia, pero Verónica Ojeda está enfocada en garantizar el bienestar de su hijo. «Lo único que quiero es que él esté bien», afirmó con convicción. Su intención es que Dieguito crezca en un ambiente tranquilo, alejado de la polémica y rodeado de amor.
A pesar de los desafíos, la mamá del niño se muestra fuerte y decidida. Con el apoyo de su entorno más cercano, sigue adelante para que su hijo tenga la mejor infancia posible, lejos de las sombras del pasado y con la oportunidad de construir su propio camino.