sábado, 19 de abril de 2025 11:00
Fiel a su estilo punzante y sin filtros, Yanina Latorre volvió a convertirse en protagonista de un momento televisivo tan inesperado como picante. Durante su programa de espectáculos en El Observador, la panelista reaccionó con una mezcla de asombro y carcajadas ante una reciente entrevista de Adrián Suar, donde el productor y actor expresó su intención de fundar “una escuela de producción y dramaturgia”. La sola idea desató una avalancha de comentarios entre los panelistas, y la propia Yanina no pudo evitar burlarse en vivo de lo que consideró una ocurrencia insólita.
Todo comenzó cuando el equipo de producción le acercó a Latorre una nota en la que Suar respondía preguntas vinculadas a su presente laboral, especialmente en el marco del estreno teatral de Mazel Tov. El empresario, que actualmente enfrenta un escenario complejo en la televisión abierta, compartió sus deseos de que «se pueda volver a producir, que se den los costos que permitan que el mercado…». Sin embargo, Yanina interrumpió la lectura con un gesto teatral: arrugó la hoja, soltó una risa irónica y exclamó: “No quiero terminar de leer”.
La escena no quedó ahí. Entre las bromas de sus compañeros, que la incitaban a seguir leyendo, Latorre finalmente accedió, pero no sin antes advertir que lo que seguía era aún más llamativo. Al leer la pregunta “¿Cuál es la meta que te queda por conquistar?” y encontrar la respuesta de Suar —»una escuela de producción y dramaturgia»—, no pudo contener una nueva carcajada, cargada de sarcasmo.
«¡Una escuela de dramaturgia!», repitió Yanina con tono burlón, generando un revuelo inmediato en el estudio. La reacción no tardó en viralizarse en redes sociales, donde las opiniones se dividieron entre quienes compartían la incredulidad de la panelista y quienes defendieron el proyecto educativo de Suar como una posible contribución al medio.
Si bien la eximia panelista no profundizó demasiado en su crítica, quedó claro que su desacuerdo radica en la falta de credibilidad que, a su juicio, tendría el productor en el terreno de la dramaturgia. En el programa se deslizaron también otras frases filosas que alimentaron la polémica, como referencias al “formato repetido” de las ficciones que produjo Pol-ka en los últimos años, o a su histórica alianza con figuras que —según Latorre— no representan una renovación real del contenido televisivo nacional.
Lo cierto es que Adrián Suar, creador de éxitos como Gasoleros, Los Simuladores (en coproducción) y Sin código, lleva décadas siendo una figura clave en la industria del entretenimiento argentino. Su propuesta de abrir una institución formativa puede tener fundamentos sólidos desde lo profesional, pero al parecer, su anuncio cayó en el radar de quienes ven en su legado más pasado que futuro.