InicioSociedad"Cuidar la casa común": Papa Francisco y su legado ecológico

«Cuidar la casa común»: Papa Francisco y su legado ecológico

Mientras en el Vaticano se prepara la sucesión del papa Francisco el próximo 7 de mayo, resuenan algunos de los principales mensajes que el pontífice dejó sobre los problemas actuales de la humanidad. Con una mirada global desde el norte, pero con profundas raíces en el sur, Francisco ofreció una lectura crítica sobre la relación entre el ser humano, el medio ambiente y la pobreza.

A lo largo de su tarea como Papa, Francisco publicó dos importantes documentos: Laudato Si’ (2015) y Laudate Deum (2023). En ellos expresó su visión sobre desafíos globales como el cuidado del medio ambiente, la lucha contra la pobreza y la necesidad de una responsabilidad social más profunda.

«Hoy no podemos dejar de reconocer que un verdadero planteo ecológico se convierte siempre en planteo social, que debe integrar la justicia en las discusiones sobre el ambiente, para escuchar tanto el clamor de la tierra como el clamor de los pobres», escribe Francisco con un lenguaje simple y accesible.

La encíclica Laudato Si’, compuesta por seis capítulos, propone que el origen de la crisis ambiental radica en el antropocentrismo, es decir, en haber colocado al ser humano como centro absoluto del universo. «Hay una íntima relación entre los pobres y la fragilidad del planeta», destaca el Papa.

Francisco también denuncia los desequilibrios del sistema económico actual:

«Los poderes económicos continúan justificando el actual sistema mundial, donde priman una especulación y una búsqueda de la renta financiera que tienden a ignorar todo contexto y los efectos sobre la dignidad y el medio ambiente», afirma. «Así se manifiesta que la degradación ambiental y la degradación humana y ética están íntimamente unidas», agrega.

La preocupación por el cambio climático atraviesa todo el documento. Francisco sostiene:

«Se ha vuelto urgente e imperioso el desarrollo de políticas para que en los próximos años la emisión de anhidrido carbónico y de otros gases altamente contaminantes sea reducida drásticamente», promoviendo así el uso de fuentes de energía limpias y renovables.

El Papa también introduce el concepto de deuda ecológica entre el Norte y el Sur:

«La tierra de los pobres del Sur es rica y poco contaminada, pero el acceso a la propiedad de los bienes y recursos para satisfacer sus necesidades vitales les está vedado por un sistema de relaciones comerciales y de propiedad estructuralmente perverso», denuncia.

Además, remarca la necesidad de un acuerdo global para hacer frente a estos desafíos:

«Para afrontar los problemas de fondo, que no pueden ser resueltos por acciones de países aislados, es indispensable un consenso mundial que lleve, por ejemplo, a programar una agricultura sostenible, a desarrollar formas renovables de energía y a asegurar el acceso universal al agua potable».

Pese a las numerosas cumbres internacionales sobre el ambiente, el Papa lamenta:

«Las cumbres mundiales sobre el ambiente de los últimos años no respondieron a las expectativas por falta de voluntad política».

Con Laudate Deum, publicada en 2023, Francisco actualizó su llamado, esta vez con un tono aún más urgente ante la crisis climática. Mientras Laudato Si’ plantea una reflexión amplia sobre la necesidad de cuidar la «casa común», Laudate Deum alerta sobre la insuficiencia de los avances logrados y exige acciones inmediatas para frenar el deterioro ambiental.

Laudato Si’ invita a una transformación cultural y espiritual, mientras Laudate Deum exige acciones rápidas y profundas para evitar un desastre irreversible.

Más noticias
Noticias Relacionadas